La Plata, dic 29 (DIB).- La gobernadora María Eugenia Vidal
vivió momentos de tensión cuando enfrentó a un grupo de guardavidas de Mar del
Plata que se encontraba reclamando por puestos de trabajo e interceptó la
camioneta en la que se trasladaba.
El incidente se produjo luego de que Vidal dejara
inauguradas las playas que la Provincia equipó con diversas comodidades para
los turistas de este verano. Mientras intentaba irse en el vehículo oficial,
unos 50 guardavidas se cruzaron en la calle para poder hablar con ella y
plantearle la problemática del sector. En ese momento, los guardavidas que se
encontraban apostados en la costa desde temprano pidiendo una reunión, se
abalanzaron contra la camioneta impidiendo su paso. Inmediatamente, efectivos
de la Policía bonaerense y de Infantería rodearon el automóvil, protagonizando
algunos empujones y forcejeos con los manifestantes.
En ese momento, la mandataria bajó del vehículo oficial e
increpó a los manifestantes: “¿A ustedes les parece que esta violencia es
la manera? ¿Me tengo que bajar del auto para que esto no suceda?”, le
advirtió molesta la mandataria al titular del gremio, Néstor Nardone, que
intentaba explicarle que no pudo contener a los afiliados que se cruzaron una y
otra vez para cerrar el paso y a punto estuvieron de un roce más intenso con
los policías que intentaban poner orden a la situación.
“Intentamos llegar por todos los medios y no pudimos”, le
señaló el dirigente a la mandataria. Pero ella aseguró que “recibe a todo el
mundo”, y recordó su reunión con los familiares de víctimas del delito. A su
vez, le explicó que ella fue anoticiada de la presencia de los trabajadores
pocos minutos antes de salir, por lo que había acordado que la cúpula del
sindicato iba a mantener una reunión informal con el secretario general de la
gobernación, Fabián Perechodnik.
“¿Les parece que la violencia es la manera?, esta es la peor
manera de vincularnos”, les dijo Vidal a los manifestantes, al tiempo que agregó
“ustedes quieren que los escuchen, mi equipo o yo los van a escuchar, pero
ahora les pido que se corran y me dejen pasar”.
Tras este intercambio, la mandataria se subió al auto y se
retiró del lugar. El reclamo, según el sindicato, era para exigir la
reincorporación de ocho guardavidas que quedaron sin trabajo.
Pedido de disculpas
El titular del gremio, Néstor Nardone, se disculpó por los
incidentes y aseguró que “fue un malentendido”. “Entendí mal que la gobernadora
me iba a recibir y salieron a cruzarle la camioneta y hacer lo que pasó”,
expresó el dirigente gremial. (DIB) FD